lunes, 24 de enero de 2011

"Margarita" Albert Pons (2009)




Dentro del ciclo “Emergentes y Sumergidos” que nos ofrecen cada domingo María Adell y Marta Bassols en la Asociación Freedonia del Raval, tuvimos el honor de visionar en primicia el documental de Albert Pons, Margarita también ambientado en el Raval.

Albert, joven cineasta salido de la ESCAC empezó a rodar este documental en 2004, en un momento en el que la especulación inmobiliaria del barrio era un tema candente. Partiendo con la idea de hacer un documental al respecto, como si de apartar hojas de alcachofa se tratara hasta llegar al corazón de la historia, Albert fue profundizando en el barrio y su gente hasta encontrarse, gracias al Dr.Franch, médico que pasaba consulta a los viejos del barrio, con Margarita y Pilar. Margarita, de noventa y tantos, vive sola en su piso del Raval, sin más compañía que la que le brinda Pilar, de ochenta y pocos, y que se encarga de limpiarle la casa y hacerle la comida. Aunque dicho así parezca idílico y conmovedor, entre las dos señoras se instaura un clima de tensión y una especie de lucha de poderes que ninguna de las dos abandona en parte por miedo a estar todavía más solas.



Margarita, llegó a Barcelona en sus años mozos y ejerció la prostitución en las Ramblas, o en lo que antes llamaban “el barrio chino”. “¿Barrio chino?”, pre

guntó la joven Margarita, nos explica, ¿”Y dónde están los chinos? Luego me explicaron que era un barrio en el que los hombres iban a buscar mujeres. ¡Qué ignorante!¡Qué cateta!”-ríe Margarita mientras nos cuenta sus inicios a cámara. Por otra parte, el personaje algo oscuro de Pilar y sus interminables discursos surrealistas con ciertos delirios de grandeza, nos revela una auténtica drama queen, dónde sus miradas a cámara, sus silencios, sus confesiones con lengua viperina nos descubren la relación amor/odio de las dos viejas, que no se dejan por pena, pero constantemente están a la greña.

Albert, pasó con estas mujeres alrededor de 7 meses, grabándolas prácticamente a diario, hasta que ellas se acostumbraron a él y a la presencia de la cámara, presencia que prácticamente desaparece, se hace invisible a pesar de que las dos mujeres son conscientes de ella en todo momento y la utilizan como válvula de escape, dónde vierten su desconfianza para con la otra, sus miedos, sus delirios y sus penas.



Bebiendo de la influencia de otros documentaristas como Jordà , Guerín o los hermanos Maysles, Albert rueda con una cierta fría proximidad, sin involucrarse nunca del todo. Gracias al montaje de Pau Teixidor se crea un equilibrio entre los parlamentos de Pilar y los silencios de Margarita, así como cierta narrativa en loop, subrayando la rutinaria cotidianidad que se establece entre las dos (Pilar le pregunta cada día que quiere para comer, Margarita da cuerda al reloj cada día en una escena llena de connotaciones y lecturas) .

Margarita, a pesar tratar un tema bastante dramático (la soledad de los mayores en un barrio en plena transformación pero también en plena decadencia, que evidencia el final de una época) Pons muestra dos personajes (ya que prácticamente actúan delante de la cámara) y situaciones en ocasiones cargadas de humor.

Especialmente emotivo el principio, con una serie de situaciones en blanco y negro, donde el doctor Franch conversa con gente mayor del barrio, y el final, dónde, después de una caída Margarita es ingresada a una residencia de ancianos (guardería de viejas, como apunta Margarita en una ocasión) en Alagón, Zaragoza, por unos familiares. Cuatro años después Albert y Pau la encuentran todavía allí, con un profundo cambio en ella, más cerca de la muerte, más ajada y ausente pero todavía capaz de enviar a la mierda a sus compañeras. Un guiño a cámara, nos la devuelve más a la vida.

Como Antoni Padrós, padrino cinematográfico de Pons, dijo respecto a Margarita, se trata de una ¿Qué fue de Baby Jane? en el Raval. Una historia sobre el final de una época, sobre un barrio complejo acosado por la especulación inmobiliaria, sobre la soledad y el abandono de tantas Margaritas y Pilares que habitan en él.

3 comentarios:

  1. Un estupendo análisis para una maravillosa peli, sí! Lo del loop es una gran verdad...el momento "qué quieres de comer? te traigo una "mitjana"?", así repetido una y otra vez, es impagable...Gracias, nena, un placer leerte, as usual!

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  2. Deborul. Qué bonito todo lo que dices.Y qué bonito lo dices. Estoy emocionada. Gracias.

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  3. Hoy hemos visto Margarita en la Filmoteca y nos ha encantado. Una pelicula genial.

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